Publicado en junio de 2018
Este módulo es un recurso para los catedráticos
Una breve historia del terrorismo
En cuanto a la elección de objetivos, es hasta hace relativamente poco que muchos de los medios tácticos y métodos del terrorismo moderno se han desarrollado a partir de los que empleaban los Estados en los conflictos armados inter se. Se ha señalado específicamente que, hace un siglo, los códigos terroristas para elegir su objetivo se asemejaban a los códigos de los militares profesionales en cuanto a respetar la diferencia entre, por un lado, los soldados y los oficiales y, por otro lado, los civiles inocentes (p. ej., el asesinato selectivo de Franz Ferdinand, archiduque de Austria, el 28 de junio de 1914) (Walzer, 1977, págs. 197-234). Ocurría de esta forma pese a que, alrededor de mediados del siglo XIX, el aumento de armamento industrializado propició que ya no se eligiera un objetivo determinado, es decir, los atentados contra el enemigo se volvieron más indiscriminados y letales. Los medios y métodos de guerra industrializados e indiscriminados que se emplearon durante las dos «guerras totales» del siglo XX (p. ej., el incumplimiento generalizado del principio de distinción) instruyeron eficazmente a aquellos que se convirtieron en revolucionarios terroristas de la posguerra y quienes también adoptaron armas y formas de lucha más irregulares, como la guerra de guerrillas urbanas. En el mundo actual, las armas de efectos indiscriminados (p. ej., el bombardeo a gran altitud, armas de destrucción masiva (ADM), entre otros) son elementos frecuentes.
En cuanto a las estrategias terroristas, David Rapoport, gracias a su influyente concepto de «oleadas» del terrorismo, plantea un manera práctica de conceptualizar la evolución del terrorismo moderno como un recurso de la violencia revolucionaria (Las cuatro oleadas del terrorismo). Por ejemplo, una oleada comprende desde finales del siglo XIX o comienzos del siglo XX, la llamada «oleada anarquista». Otra es la «oleada anticolonial», la cual inicia con el principio político de libre determinación posterior a la Primera Guerra Mundial. Un ejemplo de ello es el arbitraje en las islas Åland en 1921 y su evolución violenta que se convirtió en un derecho legal poco después de la Segunda Guerra Mundial, como los casos de la guerra civil de Argelia y la guerra de Vietnam).
Por su parte, las tácticas empleadas en cada una de estas oleadas reflejaban usualmente aquellas empleadas por los Estados durante los conflictos armados, sobre todo porque, a través de los siglos, los soldados desmovilizados han vuelto a sus hogares al final de la guerra plenamente capacitados tácticamente para utilizar la fuerza, mientras que el nombre de cada oleada terrorista refleja sus principales objetivo estratégicos. Asimismo, la teoría de las oleadas evidencia que los grupos terroristas ascienden y caen, que se pueden disolver cuando ya no son capaces de inspirar a otros a continuar con una resistencia violenta a la autoridad, a solucionar una queja de manera violenta o a protestar violentamente en contra de la falta de concesiones políticas. Este punto también sugiere que el terrorismo y sus motivaciones se ven claramente afectados por las condiciones y cambios en las culturas sociales y políticas.
En cambio, Parker y Sitter (2016) postulan que las situaciones terroristas violentas ocurren alrededor del mundo no en forma de oleadas, sino porque los actores terroristas encuentran motivación en cuatro fuerzas con objetivos concretos: el socialismo, el nacionalismo, el extremismo religioso o el exclusionismo. Estos motivadores subyacentes no tienen una secuencia cronológica, es decir, no es que uno muera y surja el otro. En cambio, pueden trabajar en paralelo y, ocasionalmente, superponerse para incentivar distintos movimientos terroristas acorde a sus necesidades.
Este discurso académico nos da una idea de los debates y discusiones que ocurren cuando se desea comprender o categorizar mejor los grupos «terroristas». Sin embargo, esta serie de módulos universitarios no adopta una postura sobre cuáles puedan o no puedan ser los factores motivacionales de muchos de los actores no estatales. Estos son temas que puede que quienes impartirán este curso, u otras partes de la serie de módulos universitarios, deseen explorar más en diversos contextos.
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