Área Temática: Corrupción

 

Un problema mundial

La corrupción es un fenómeno social, político y económico complejo que afecta a todos los países. La corrupción socava las instituciones democráticas, frena el desarrollo económico y contribuye a la inestabilidad gubernamental. La corrupción ataca los cimientos de las instituciones democráticas distorsionando los procesos electorales, pervirtiendo el estado de derecho y creando obstáculos burocráticos cuya única razón de existir es la solicitud de sobornos. El desarrollo económico se ve atrofiado al desalentarse la inversión extranjera y las pequeñas empresas del país a menudo encuentran imposible superar los "costos iniciales" requeridos debido a la corrupción.

 

Una respuesta global

La Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción es el único instrumento internacional anticorrupción jurídicamente vinculante. El enfoque de amplio alcance de la Convención y el carácter obligatorio de muchas de sus disposiciones la convierten en una herramienta única para desarrollar una respuesta integral a un problema mundial. UNODC ha sido designada por la Asamblea General de las Naciones Unidas como la oficina guardiana del instrumento.

La Conferencia de los Estados Partes (COSP) es el principal órgano de formulación de políticas de la Convención, apoya a los Estados parte y signatarios en su implementación y brinda orientación política a UNODC para desarrollar actividades anticorrupción. La implementación de la Convención por los Estados partes es examinada a través de un proceso único de revisión entre pares, titulado el Mecanismo de Examen de la Aplicación.

 

Nuestras actividades

Para apoyar los esfuerzos de los Estados parte en implementar plenamente la Convención, UNODC brinda asistencia técnica multisectorial en diversas áreas temáticas enmarcadas en los cuatro pilares sustantivos del instrumento, a saber: prevención de la corrupción, penalización y aplicación de la ley, cooperación internacional y recuperación de activos.