Congreso de las Naciones Unidas sobre Prevención del Delito: 50 años

Durante medio siglo, las Naciones Unidas han celebrado congresos para fortalecer la cooperación internacional para combatir el delito, que está en aumento. El Primer Congreso se celebró en Ginebra en 1955. Desde entonces, ciudades tan distantes entre sí como El Cairo y Caracas han acogido esta importante reunión.

Estos congresos han influido en las políticas nacionales y la práctica profesional. En la actualidad son especialmente importantes, dado que la globalización de muchos problemas contemporáneos, incluido el delito, ha hecho que la colaboración internacional sea una prioridad urgente.

El Undécimo Congreso, que se celebra en Bangkok en abril de 2005, se centra en “Sinergias y respuestas: alianzas estratégicas en materia de prevención del delito y justicia penal”. Las Naciones Unidas esperan que la influencia de este Congreso llegue tan lejos como los resultados de esas reuniones anteriores.

• Las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el tratamiento de los reclusos, aprobadas en el Primer Congreso, todavía se usan e inspiran por igual a los países y las organizaciones de derechos humanos.
• Declaración sobre la Protección de Todas las Personas contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, aprobada por el Primer Congreso, luego se convirtió en una convención en la Comisión sobre Derechos Humanos.

Las actividades de las Naciones Unidas para crear un marco común de orientaciones para la justicia penal datan del establecimiento de la Organización.

Sin embargo, la tradición de los congresos precede a la creación de las Naciones Unidas. Ya en el siglo XIX, los representantes de diversas naciones europeas se reunían periódicamente para intercambiar información y examinar normas comunes para el tratamiento de los delincuentes. En 1872 se creó la Comisión Penitenciaria Internacional —que luego se convirtió en la Comisión Internacional Penal y Penitenciaria— encargada de formular recomendaciones para la reforma penitenciaria en Europa.

Cuando se creó la Sociedad de Naciones en 1919, la promoción del Estado de derecho en la comunidad internacional formó parte de su mandato. La Comisión Penitenciaria Internacional se afilió a la Sociedad y continuó celebrando conferencias en las capitales europeas.

Cuando la Sociedad cesó sus actividades en 1946, sus activos se transfirieron a las Naciones Unidas, recientemente creadas. La Asamblea General disolvió la Comisión Internacional Penal y Penitenciaria en 1950 y transfirió a las Naciones Unidas la obligación de celebrar conferencias internacionales periódicas sobre cuestiones relativas a la prevención del delito.

Casi sesenta años más tarde, esta tradición continúa: expertos de todo el mundo se reúnen en Tailandia para celebrar el Undécimo Congreso de las Naciones Unidas sobre Prevención del Delito y Justicia Penal, del 18 al 25 de abril.

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